Y tras dar el gran paso en su relación, ha llegado el momento de decorar su nidito de amor y de comprar algo básico para su casa: el armario de Bea. Sin embargo, la visita a la tienda de muebles y el paseo por la sección de niños ha acabado con una conversación de lo más jugosa. ¿Se le está despertando el instinto maternal a Bea?