Aitor, de 12 años, es el capitán del equipo alevín de fútbol sala de Madrid, Limones 5. El pasado domingo 8 de abril, demostró los valores que debe tener un líder sobre el campo. Tras cometer una falta que dejó a su rival, Samuel, en el banquillo, Aitor, entre lágrimas, acudió rápidamente a interesarse por su estado y a pedirle disculpas. Tanto Samuel, de 11 años, como el resto de jugadores del Limones 5, su entrenador y la grada aplaudieron su gesto.
