¡Mucho ojo a dónde pisas! El escenario de Eurovisión es uno de los más complicados y vigilados de todo el panorama musical a lo largo del año, y un fallo puede ser fatal. Lo cometió Netta, la cantante israelí, que pisó en falso en las escaleras que dan acceso a las tablas y cayó, ante el susto generalizado de los espectadores.

Por suerte, el resbalón se quedó en un susto y la cantante se puso rápidamente en pie. Netta ha vivido un auténtico carrusel de emociones en los últimos días, después de comenzar la semana eurovisiva habiendo encabezado las listas de favoritos durante semanas, para acabar perdiendo el primer puesto a manos de la representante de Chipre.

La caída de Netta no fue el primer susto importante de esta edición. Ya en la primera jornada de ensayos Mikolas Josef, representante de la República Checa, sufrió una dura caída practicando una voltereta de su actuación y tuvo que ser evacuado y hospitalizado. Pese a todo, el checo se las apañó para salir a tiempo de clasificarse para la final del sábado: ‘The show must go on!’