Quizá ver un castor esquiando o un sumo haciendo algún que otro salto, no sea lo más visto en la montaña. Por tanto, si no quieres ser el centro de atención te aconsejamos no usar el disfraz. Pero si lo que quieres es evitar lesiones cuando te caes... ¡es perfecto! Divertido, gracioso y todo el mundo cuando te vea querrá preguntarte dónde lo has comprado. ¿Te animarías a probarlo? ¡En 'Partido a partido' nos atreveríamos sin dudarlo!