Tan solo ha pasado un mes desde que Manu retomó el boxeo, y cada vez que va a entrenar podría protagonizar una película de suspense. "Tengo un poco de miedo", así anunciaba Manu el momento previo de empezar la clase. ¿Vosotros qué podéis pensar? Y más cuando acto seguido de pronunciar esas palabras, enfoca con su cámara a su entrenador que de músculo y volumen no anda escaso.