La experta en nutrición y autora del libro ‘Tu cerebro tiene hambre’, Boticaria García, despeja en esta serie de vídeos las dudas más habituales que genera la alimentación y la pérdida de peso saludable a medida que nos hacemos mayores. En el anterior capítulo, explicó los cambios que se producen en el organismo de la mujer durante la menopausia, así como a la forma en la que el estrés afecta durante esta etapa y sus modos de combatirlo. En esta ocasión, ha querido referirse a la preferencia de dulce o salado que tiene cada individuo y en qué puede afectar al organismo.
Cuando piensas en darte un capricho, ¿eres más de dulce o de salado? Cada individuo tiene preferencias gastronómicas distintas y además, la elección dependerá de diversos factores fisiológicos y psicológicos.
En primer lugar, depende directamente del número de papilas gustativas, distinto en cada persona. Del mismo modo, está relacionado con los hábitos adquiridos en nuestra infancia. Por último, depende del efecto que buscamos desatar en nuestro organismo después de ingerir una determinada comida, siendo el dulce el que provoca un aumento de la secreción de la dopamina, la hormona de la felicidad.
Sin embargo, el consumo de azúcares debe ser moderado para prevenir el riesgo de desarrollar enfermedades y además, es posible actuar frente a los hábitos según explica Boticaria García en el vídeo.